Santuario Nacional
Deléitate con un espectáculo único, disfruta del atardecer en este santuario y observa miles de aves playeras, zambullidores y esbeltos patos que revolotean sobre pantanos, fangales y playas arenosas.
Este santuario es uno de los pocos paraderos en toda la costa peruana para aves migratorias de otros continentes en su viaje de norte a sur, donde es posible encontrar hasta 211 especies de aves, como la garza azul, la garza pechiblanca y la gaviota capucho gris.
Es en el estuario del río Tambo en el santuario donde siempre tendremos la oportunidad de observar un gran número de aves, y en mayor abundancia durante los meses de verano, época en donde llegan las gaviotas de Franklin (Larus pipixcan), después de su largo viaje desde Norteamérica; a los rayadores (Rinchops niger), que llegan de la selva y diversas especies de gaviotines como el gaviotín elegante (Sterna elegans), gaviotín común (Sterna hirundo), y el gaviotín patinegra (Sterna sandvicensis).
Hace años, durante el mes de febrero, cuando el personal del santuario fue a realizar el monitoreo de aves en la desembocadura del rio, al llegar se llevaron una gran sorpresa: era increíble ver la gran cantidad de aves que había en este lugar. Según narran, contaron más de 45 000 aves entre gaviotas, gaviotines, pelícanos, rayadores y playeros. Pueden imaginarse el tiempo y la emoción que sentían al ver tanta población de aves.
Planifica tu visita al Santuario Nacional Lagunas de Mejía, aquí.